Escritor

Durante su residencia en Nueva York, en 1963, inició su primera novela, La traición de Rita Hayworth. La concluyó en 1965 y participó con ella en el Concurso “Biblioteca Breve”, de la Editorial Seix Barral; siendo finalista, no alcanzó a ser publicada; logró hacerlo de modo independiente en 1968. En 1969, fue proclamada mejor novela por el periódico Le Monde.

En 1967, de regreso en Buenos Aires, escribió Boquitas Pintadas, novela publicada en 1969, como un folletín en dieciséis entregas (las revistas Mundo Nuevo y Primera Plana mostraron anticipos), que convirtió a Puig en un escritor de renombre: el libro vendió en Argentina más de cien mil ejemplares.

La novela The Buenos Aires affair (1973) fue prohibida por la dictadura de 1976, alegando que se trataba de un “atentado al pudor”.

Además, Puig era amenazado constantemente, razón por la que decidió exiliarse en México, en donde terminó El beso de la mujer araña, en 1976; también prohibida por la dictadura. Considerada por la crítica como una de las mejores novelas de M. Puig, le otorgó a su autor reconocimiento internacional; más aún con la inolvidable película de Héctor Babenco. Su versión teatral fue representada en escenarios de todo el mundo; transformada en musical, la pieza ganó en Broadway siete premios Tony. “Es la historia de Valentín Arregui Paz, ideólogo y aspirante a revolucionario, quien se halla encerrado en la celda de una prisión argentina con Luis Molina, decorador de vidrieras, homosexual y aspirante a femme fatale. Entre ellos entablan un curioso diálogo que gira en torno a dos utopías de nuestro siglo: Hollywood y la Revolución”. [En: contratapa de la edición de la Biblioteca argentina La Nación, Buenos Aires, Ed. Planeta, 2001]

En 1982 terminó la que probablemente haya sido su obra más compleja: Sangre de amor correspondido. En 1988 publicó su novela Cae la noche tropical.

Está considerado uno de los principales exponentes en lengua española del pop-art literario y uno de los innovadores de la literatura hispanoamericana, por incluir técnicas e imágenes de la cultura de masas, procedimiento característico del pop- art, en el que – debajo de la apariencia de un juego kitsch- se elabora un cuidadoso trabajo de armado, aprovechamiento y resignificación de los elementos incluidos; lo que implica un cambio respecto de los modelos tradicionales, a partir de los cuales se fueron generando nuevos modos de acercamiento al texto y diversos comportamientos lectores. [Historia de la literatura argentina, CEAL, Buenos Aires, 1968]

 

Experimentador narrativo

La obra de Manuel Puig irrumpió en la escena artística durante los años sesenta. Su primera novela, La traición de Rita Hayworth, ambientada en un pueblo cuyo nombre en la ficción es Coronel Vallejos, claramente inspirado en su General Villegas natal, adelanta las características fundamentales de la obra de Puig: experimentación narrativa (a partir de la utilización de técnicas que le otorgaba su formación de guionista, como montaje, desplazamiento, asociación de ideas) y empleo de formatos y estereotipos provenientes de géneros considerados "menores", tales como folletín, radioteatro sentimental, telenovela, etc.

“En las novelas, Puig encuentra otros discursos sociales. Aparece allí un montaje (en términos cinematográficos) de desechos: titulares de diarios, conversaciones telefónicas desgrabadas o tomadas de su versión taquigráfica, reportaje imaginario (…), informe de autopsia, extractos de manual de medicina forense y divulgación científica sobre comunicación satelital. Otros los trae la corriente de la misma literatura: biografía (…) parodia de la novela objetivista francesa; fluir de la conciencia..." [Roxana Páez, Manuel Puig. Del pop a la extrañeza, Buenos Aires, Editorial Almagesto, 1995.]

Boquitas pintadas está escrita en forma epistolar, con una linealidad que va desde 1947 hacia atrás, con grandes saltos cronológicos. Se utilizan las técnicas narrativas del monólogo interior y fragmentos de radioteatros, diferentes tipos de narrador, como si la novela por momentos se auto narrara y sólo hubiese un compilador de las cartas.

Se reconocen como constantes en toda la obra de Puig la confrontación entre realidad y fantasía, el cambio de identidades y la línea sutil que separa cordura y locura, en definitiva un juego crítico, onírico e irónico que resulta tentador para el teatro.

El Puig dramaturgo recupera su amor por la representación, expresada en su afición por el cine -los musicales y melodramas alimentaron toda su literatura- y en sus intentos frustrados de hacer películas.

En 1983 adaptó para cine de "El beso de la mujer araña", dirigida por Héctor Babenco, con guión de Leonard Schrader. Actuaron Raúl Julia, Sonia Braga y William Hurt, quien ganó un Oscar por su actuación en el personaje del homosexual que encarnó en un símbolo para el público gay.

Luego se convirtió en comedia musical, éxito en Broadway (ganó siete premios Tony), en ópera con música del alemán Hans Werner Henze y en obra de teatro escrita por el propio autor.

La obra de Manuel sigue interesando en los ámbitos universitarios pues se la valora actualmente como una de las más originales del siglo XX, por ser considerado un innovador en las letras hispanoamericanas.

 

Guionista de cine

De niño, Manuel iba al cine diariamente con su madre, Male.
"Incluso antes de empezar la escuela a los cuatro años, en 1936, Coco (Manuel) (…) veía todo lo que había por ver (…) en su mayor parte cine americano” -relató Male.[En: Suzanne Jill-Levine, Manuel Puig y la mujer araña. Su vida y ficciones. Buenos Aires, Seix Barral, 2002.]

"Nosotros veíamos el cine en versión original con subtítulos en español. (…) La realidad era el cine. Los idiomas de la realidad que había que aprender eran el inglés y después el italiano y el francés", dijo en una charla conservada en audio en la Audiovideoteca de Escritores.

En la Alliance Française, el British Institute y la Sociedad Dante Alighieri, estudió "los idiomas del cine”, según sus palabras.

En 1956, con una beca, estudió cine en el Centro Sperimentale di Cinematografia, de Roma. Conoció a Rossellini, De Sica, Pasolini, Moravia y al fotógrafo cubano Néstor Almendros. Sin trabajo, viajó a París, Londres y Estocolmo, donde en 1956 escribió los borradores de sus dos primeros guiones, mientras se ganaba la vida enseñando español e italiano y como lavacopas.

Asistente de dirección en Roma y en Buenos Aires desde 1960 a 1962, colaboró en dos películas: America di notte (coproducción ítalo-argentina) y Una americana en Buenos Aires. Escribió La tajada, su primer guión en castellano.

El director cinematográfico argentino, Leopoldo Torre Nilsson, se interesó en llevar al cine la novela Boquitas pintadas, en 1970. Tres años más tarde, Manuel redactó el guión que se estrenó en 1974: "No me sentí cómodo en esta tarea de adaptador (…) Tenía que resumir la novela, podarla, encontrar fórmulas que sintetizaran aquello que en su origen había sido analíticamente expuesto”, señaló el escritor. [En: Suzanne Jill-Levine, Manuel Puig y la mujer araña. Su vida y ficciones. Buenos Aires, Seix Barral, 2002.]

El film Pubis angelical se estrenó en 1982 y no contó con la aprobación de Puig. La película estaba basada en su novela de 1979, fue dirigida por Raúl de la Torre, protagonizada por Graciela Borges, con música de Charly García.

El título de la primera novela de Puig, La traición de Rita Hayworth, marcaba ya su lugar de origen: el cine, del que nunca se desprendió como escritor; tanto que él mismo escribió guiones cinematográficos y algunas de sus novelas dieron lugar a adaptaciones como la de Javier Torres que en 2004 estrenó la película Vereda Tropical, basada en la novela de Puig Cae la noche tropical, que refleja la estancia del escritor en Río de Janeiro.

 

Hombre

Escritor argentino nacido en General Villegas, provincia de Buenos Aires, en 1932. Sus padres, María Elena Delledonne y Baldomero Puig, lo bautizaron con el nombre de Juan Manuel, pero familiarmente lo llamaban "Coco”. Desde 1965, siendo ya conocido escritor, dejó de usar su primer nombre.

Estudió violín y piano. Durante su adolescencia, leyó la novela Sinfonía pastoral, de André Gide que, según declaró, lo convenció de escribir. Hasta los trece años vivió en su pueblo natal; al no haber allí colegio secundario, sus padres lo trasladaron a Buenos Aires en 1946, donde cursó sus estudios de bachiller en el Colegio Ward, de Ramos Mejía.

En 1950 se inscribió en la Facultad de Arquitectura y en 1951, cambió por Filosofía y Letras. Descubrió los libros de Hesse, Aldous Huxley, Sartre, Freud. En 1952, tomó un curso sobre la novela policial dictado por Borges.

En 1956 viajó a Roma, Italia, donde con la ayuda de una beca, estudió cine en el Centro Sperimentale di Cinematografia. En 1961 viajó nuevamente a Roma y volvió a frecuentar los estudios de Cinecittà. Se replanteó su futuro como director o guionista.

Desde 1963 trabajó, hasta 1967, para la compañía aérea Air France. Durante este período, se instaló en Nueva York para asistir a los musicales de Broadway y escribió los tres primeros capítulos de su novela La traición de Rita Hayworth.

Tras convertirse en un autor destacado en su país natal, tuvo que exiliarse ya que fue perseguido por la Triple A, previamente al golpe de estado de 1976. En septiembre de 1973, Puig se fue de la Argentina antes de que fuera censurada su novela The Buenos Aires Affair. Frente a las amenazas y el peligro que corría su vida, decidió no regresar. Durante su exilio se radicó, sucesivamente, en México, Estados Unidos (en 1977 vivió circunstancialmente en Nueva York y dirigió un taller de escritura en la Universidad de Columbia). Desde 1981 se radicó en Río de Janeiro, Brasil, donde en 1985, hizo una adaptación para cine de El beso de la mujer araña, que luego fue filmada.

Cuando en 1983 retornó la democracia a la Argentina, Puig optó por no regresar. Continuó viviendo en Río de Janeiro hasta comienzos de 1990, cuando se instaló otra vez en México (Cuernavaca), donde murió pocos meses después a la edad de 57 años, el 22 de julio, dejando inconclusa la novela Humedad relativa: 95%.

En 1982 había sido candidato al Premio Nobel de Literatura. Y en 1987, la University of Aberdeen le había otorgado el Doctorado Honoris Causa.