El territorio que ocupa actualmente la República Argentina estaba poblado por sociedades que, en general, se mantuvieron separadas entre sí, lo que posibilitó que su relación e intercambio recíproco fueran escasos. Estas sociedades alcanzaron distintos niveles de desarrollo económico y complejidad cultural.
En cada región, el aprovechamiento de los recursos naturales incidió en sus patrones de asentamiento y control del territorio. En otras palabras, cada grupo debió adaptarse y transformar el medio que habitaban y para ello desarrollaron una variedad de productos tecnológicos. Del mismo modo, sus estructuras sociales -más o menos complejas según los casos- dependían en gran parte de esa relación con el entorno inmediato.
Estos pueblos se pueden clasificar de acuerdo a la economía que les posibilitó su subsistencia. En tal sentido, se pueden distinguir:
Buscadores de comida: Ocuparon gran parte de la extensión del actual territorio argentino.
Estos grupos dependían del ambiente, lo compartían con otros, y se integraban a él, al tiempo que lo utilizaban para subsistir.
Las migraciones de estas comunidades variaban de nomadismo a seminomadismo, de acuerdo con la oferta de recursos naturales de la época del año.
Recorrían grandes extensiones en un área de baja densidad demográfica y con ecosistemas poco productivos y de bajo rendimiento. Esto configuró, en la mayor parte del actual territorio argentino, una estructura de escasa complejidad. Entre los recolectores, cazadores y pescadores aún no existía organización estatal alguna y la comunidad no excedía de los límites del agrupamiento familiar. Entre otros casos, las familias ya se habían unido en asociaciones tribales, y un adelanto ulterior se producía al agruparse diversas tribus en confederaciones estables.
Entre ellos, se encontraban los cazadores y recolectores del Chaco, los matacos, vilela, guayeurú, entre otras parcialidades. Era una zona de clima subtropical con abundantes esteros y lagunas donde el bosque alternaba con la sabana. Los inviernos eran fríos y secos.
El norte de Tierra del Fuego, las mesetas patagónicas y la pampa hasta el río Salado, el sur de la mesopotamia y parte del actual Uruguay estuvo ocupado por los cazadores de guanaco.
El extremo sur de Tierra del Fuego estuvo habitado por grupos de pescadores, cazadores y recolectoresentre los que se encontraban onas, yahganes y alkaluf. La cercanía al mar les dio la posibilidad de cazar aves y mamíferos marinos, recolectar mariscos, además de dedicarse a la pesca.
Productores de comida: se trataba de pueblos dedicados a la agricultura.
Los agricultores tropicales se ubicaban en la zona montañosa de los actuales territorios de Salta, Jujuy y el oeste de Chaco y Formosa. La agricultura que desarrollaron era de corte y quemazón o roza. Cultivaron mandioca, calabaza y luego, al entrar en contacto con los pueblos ubicados al noroeste, aprendieron a cultivar el maíz. Entre ellos, se encontraron los chané, los guaraníes, y los chiriguanos.
Los agricultores andinos ocuparon las regiones montañosas y semiáridas del actual noroeste argentino (Jujuy, Salta, Tucumán, Catamarca, La Rioja, San Juan, Mendoza, San Luis, Santiago del Estero y Córdoba). Estas sociedades perfeccionaron las técnicas de cultivo: la preparación de los terrenos, el uso de abonos, la irrigación artificial, así como la incorporación de más especies cultivables. También se dedicaron a la cría de ganado, fundamentalmente, la llama.
Muchos de estos pueblos fueron sometidos por los incas, pasando a formar parte de un imperio que llegó a extenderse hasta estas latitudes. Se calcula que los incas ingresaron en el actual territorio argentino hacia 1480, durante el reinado del inca Tupac Yupanqui, administración bajo la cual el imperio alcanzó su máxima extensión. Entre estos grupos se encontraban los diaguitas, los quilmes, los hualfines, los calchaquíes, entre otros. Particularmente en esta región, con la llegada de los españoles, el territorio y sus relaciones se modificaron sustancialmente, ya que al privilegiarse la extracción minera se alteraron las estructuras sociales de estos pueblos originarios.
Marco normativo relativo a los derechos de los pueblos originarios en la Argentina |